jueves, 31 de mayo de 2012

El León Dormido

Estás caminando sobre el Puente de Piedra que une la ciudad de Logroño con el cementerio, y tus ojos miran a lo lejos y divisan una montaña que rompe la armonía del horizonte con imperfectos rasgos y peculiar forma; e inmediatamente acude a tu mente la curiosidad de saber cuál será el nombre de ese monte que se eleva sin miedo en la verde planicie. 

Entonces señalas con el dedo y preguntas a la primera persona que se cruza en tu camino ¿dígame, cómo se llama esa pequeña cima? La palabra pequeña es ofensiva en este contexto para cualquier logroñés, pero intentan desoírla y responden ¿cuál el León Dormido? ¿ese es el nombre? No, pero todos aquí le llamamos así por la forma que tiene ¿la forma? Claro, acaso no lo ve.

Ahora el que señala con el dedo es tu interlocutor, esa la cabeza y las orejas y el cuerpo ¿no lo ve? y las patas y los pies.., no..sí, claro..perfecto..lo sé..pero por más que lo miras al derecho y al revés..no lo ves..ni despierto ni dormido, simplemente no lo ves.. y sigues viendo una montaña que tiene por nombre un apodo que todos afirman le hace honor al mismo ¿León Dormido es el nombre o el apodo? Ya no importa..vaya a ser que se despierte.

viernes, 18 de mayo de 2012

Agua del grifo


Era la última noche de las vacaciones de Svetlana en Madrid y quería comer conejo al ajillo.. Al principio no entendí bien a qué se debía tal necesidad, que había hecho que camináramos varios kilómetros en una noche calurosa para encontrar el tan querido y para mi desconocido restaurante..

Luego entendí..En Israel por una cuestión religiosa no se come ni tampoco se vende la carne de conejo, por lo que nuestra agradable caminata por las calles madrileñas estaba más que justificada.. el paseo estuvo sencillamente genial!! Mi curiosidad por ver, encontrar y recoger lo que la gente deposita en la calle, se vio satisfecha por el barrio Lavapiés.

Nuestros ojos vieron mucho, pero nuestras manos recogieron poco.. Un colorido loro de peluche..viejas revistas.. y una mesa!!! Una diminuta, original y bonita mesa. Ideal para mi habitación dije... Svetlana no lo pensó dos veces y cogió desde sus patas doradas al curioso y útil artefacto, dispuesta a seguir nuestro largo camino con un agregado más.

Caminamos por las aceras bajo la mirada curiosa de la gente, sobre todo cuando mi esbelta y pelirroja amiga llevaba - imitando a las mujeres africanas - la mesa sobre su cabeza. Entonces el espectáculo era doble.

Llegamos al restaurante. Me detuve antes de entrar, observando primero mi ropa informal frente a la formal y sofisticada vestimenta de mi amiga y dije: pregunta si puedo entrar así y con mi mesa. Para ese entonces ya era mía. Lo habíamos decidido así, ella no la podría llevar en el avión y para mí sería muy útil..

Luego de pedir permiso al camarero y que éste nos dejara un sitio cerca de la ventana dónde poner el artilugio sin llamar la atención, nos sentamos dispuestas a comer. Elegimos en el menú - muy fácil - conejo al ajillo para ella, y una menestra - plato muy rico y además barato - para mí.

Preguntó correctamente el camarero a mi amiga: "qué desea de beber", ella respondió, agua mineral con gas, por favor. Luego el camarero dirigió la mirada hacia mí y antes de que yo respondiera a una pregunta aún no formulada me dijo: y para Ud.  agua del grifo.